Aguas de mayo, por John Queras
No voy a hablar de esos chaparrones primaverales y traicioneros que esperan emboscados tras las esquinas del cielo para calarte hasta las células madre. De eso ya se encarga el ínclito Mario Picazo. Me refiero al verdadero diluvio de fragancias for men que se nos avecina estos días para regocijo de los adictos a los perfumes. Y es que parece que, tras varios meses de silencio olfativo, las marcas se han puesto de acuerdo y presentan sus novedades a la vez. Así que, cerrad los paraguas, guardad en el armario los rain ponchos y dejad que una fina lluvia de lima, bergamota de Calabria y notas amaderadas os empape el alma.
Empieza a chispear. De una nube con forma de anillo cae un chirimiri de hojas de violeta, lavanda y pachuli, tan irreverente como fresco. Son solo cuatro gotas, pero bastan para perfumar el ambiente con acordes aparentemente clásicos que en realidad esconden en su interior un corazón muy atrevido. Es como oler la luz de París. Así es Quatre pour Homme, de Boucheron (75 € / 100 ml), una eau de toilette sutilmente poderosa que evoluciona como una buena novela: un principio prometedor, un nudo repleto de sorpresas y un final inesperado. Aviso para navegantes: el tapón no se quita, se gira.
De muy lejos, pero no a través del espacio sino del tiempo, el viento arrastra una nube con aires salvajes y que, si la miras fijamente, recuerda al rostro del Alain Delon de los 60, con ese toque un poco insolente del que se sabe eterno. Corría el año 1966 cuando cayó por primera vez la llovizna joven, viva y alegre de Eau Sauvage. Hoy, casi medio siglo después, se presenta en su versión colonia, que conserva intacto el espíritu rebelde y rompedor del original, pero con nuevos matices, como las notas frescas de mandarina y pomelo. Eau Sauvage Cologne, de Dior, 92 € / 100 ml.
Cae la noche y las nubes se esconden a plena vista en la brillante oscuridad del firmamento. Están inquietas. Se nota que traman algo en un silencio de ámbar y madera. Trae consigo el crepúsculo una voluptuosa tormenta de azafrán, cardamomo y nuez moscada que pronto se desborda en un aguacero de absoluto de rosa y jazmín. Noir Extreme, de Tom Ford (126 € / 100 ml), es una fragancia oriental y excesiva que deja en la piel una cálida estela de sándalo y vainilla que se mantiene como un do sostenido. El diseñador texano lo hace todo a su manera y casi siempre se sale con la suya. Nunca defrauda. En su caso, llueve sobre mojado.
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