El complemento inesperado que todas las invitadas quieren este verano
Creías que lo tenías todo: vestido, zapatos, bolso y esa barra de labios que nunca falla. Pero no. Este verano hay un accesorio que se cuela en todos los looks de invitada, y no es el que imaginas. Es inesperado, elegante y, además, viene con historia. Spoiler: es más útil de lo que crees.
¿Has sentido alguna vez que a tu look le falta “algo”? No sabes si es una joya, un peinado distinto o quizá otro bolso… pero algo no termina de cerrar. Pues prepárate, porque ese “algo” tiene nombre y apellidos este verano. Se llama: abanico.
Sí, sí, el abanico. Ese que probablemente veías en bodas familiares pasadas y pensabas “muy mono, pero no es para mí”. Pues bien, ahora es para ti. Y para todas. Porque el abanico ha dejado de ser un simple recurso para el calor para convertirse en el accesorio que marca la diferencia.
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(@nosinmiabanico)
No hablamos del típico abanico que compras en cualquier tienda de souvenirs. Este 2025, el abanico se lleva con estilo. Con intención. Con personalidad. Hay auténticas joyas hechas a mano, con varillas de madera talladas, ilustraciones que parecen cuadros, flecos, lentejuelas, bordados… ¡hay abanicos que son más protagonistas que el clutch!
Y lo mejor: no es solo bonito, también es útil. Porque, reconozcámoslo, ¿cuántas veces has estado en una boda al aire libre, bajo el sol, intentando no derretirte? Exacto.
El lenguaje secreto del abanico
Aquí es donde la historia se pone interesante. Si aún no sigues a la influencer y tiktoker @arianehoyos, estás tardando. Ella ha sido una de las responsables de traer de vuelta este accesorio gracias a sus vídeos donde cuenta curiosidades sobre el protocolo, la moda y los pequeños gestos con mucho significado.
Uno de sus vídeos más virales es, precisamente, sobre el lenguaje del abanico. ¿Sabías que en el siglo XIX las mujeres lo usaban para comunicarse en secreto? No podían hablar libremente, así que crearon un código: si lo movías rápido, estabas impaciente; si lo sostenías junto a la mejilla derecha, decías “sí”; si lo dejabas caer… atención: estabas diciendo “te pertenezco”.
@arianehoyos te enseño el lenguaje del abanico !!!
¿Puede haber algo más romántico y misterioso a la vez? Ese toque de historia y coquetería le da al abanico una dimensión completamente nueva. Ya no es solo bonito: es un guiño a generaciones de mujeres que encontraron la forma de decir mucho sin hablar.
Cómo llevarlo (y arrasar)
Olvídate de esconderlo en el bolso. El abanico se lleva como se lleva un buen bolso de diseño: a la vista y con orgullo. Puedes jugar con contrastes —uno con color si tu look es neutro, o uno de lino blanco si llevas estampados fuertes— o incluso coordinarlo con tu manicura o tu pintalabios. ¿Demasiado? Para nada. Esos detalles son los que convierten un look en el look.
¿Una idea con mucho rollo? Llévalo atado a la muñeca con una cinta de terciopelo o seda, o sujétalo con elegancia mientras bailas. Va más allá de la estética: añade movimiento, actitud y un aire sofisticado que no se consigue con ningún otro accesorio.
¿Moda pasajera o nuevo esencial?
Todo apunta a lo segundo. En un momento en el que apostamos por lo hecho a mano, lo con historia, lo único… el abanico encaja a la perfección. Además, tiene ese encanto mediterráneo, natural y elegante que nunca pasa de moda. ¿Y en redes? Queda espectacular. Hay algo en su forma, en cómo se despliega, que convierte cualquier foto en un momento de editorial.

¿Donde comprar un abanico que sea único?
Un abanico no es solo un accesorio. Es una actitud, una forma de entrar en escena, un gesto con alma. Y si hay una marca que ha sabido elevarlo a categoría de objeto de deseo, esa es The VIANA Fan.
En The VIANA Fan han logrado redefinir la elegancia con un diseño único en el mundo: abanicos artesanales de lino, elaborados en España, con cuatro varillas y tres paños de lino. Una arquitectura sutil que fusiona la tradición con un enfoque moderno, sostenible y absolutamente sofisticado. Cada pieza está pensada como una obra de arte funcional: ligera, bella, y con presencia.


Elegancia, sostenibilidad, diseño exclusivo y artesanía 100% española son los pilares de esta firma que conquista a quienes buscan algo más que un simple complemento: buscan una historia, una pieza con alma, un símbolo de identidad.

Así que si este verano tienes una boda (o dos, o tres), ya sabes cuál es el accesorio que no te puede faltar. Te refresca, eleva tu look, y además, te conecta con una tradición preciosa.
Y no lo olvides: cuando alguien te pregunte por él, tú sonríes, lo despliegas con estilo… y dejas que hable por ti.