Secret d’Excellence, el tratamiento antiedad definitivo de Galénic
Quienes compráis vuestros productos cosméticos en la farmacia os habréis dado cuenta de que Galénic ha cambiado su imagen. Ahora su envases son más blancos, con líneas más depuradas y su logo se ha retocado ligeramente. Todo ello enfocado a darle un aire más moderno a esta marca que nació en 1978 y que, hasta ahora, siempre se ha preocupado de que sus formulaciones además de efectivas para la piel, sean un placer para los sentidos.
Por eso en Galénic no se ha parado de investigar y ahora, coincidiendo con este cambio de imagen, han lanzado Secret d’Excellence, un tratamiento que desde la marca definen como el “Santo Grial de la Belleza”, que traducido viene a ser algo así como el tratamiento antiedad definitivo ya que hidrata la piel, alisa las arrugas, unifica el tono, reafirma los rasgos y potencia la luminosidad. Y todo esto lo consigue fundamentalmente gracias a un ingrediente excepcional: el alga de las nieves. ¿Y qué tiene de especial este tipo de alga? Que resiste las condiciones más extremas del planeta. De hecho, saca rendimiento tanto del frío como del calor. En los meses de verano, aprovecha las radiaciones solares, el agua y los minerales para crecer y reproducirse y, cuando llega el frío, se vuelve de un tono rojizo y se oculta profundamente bajo la nieve produciendo una gran cantidad de activos, fundamentalmente para defenderse de los rayos ultravioleta. Entre estos activos se encuentran carotenoides antioxidantes y moléculas de supervivencia y longevidad, glicoproteínas, azúcares anticongelantes, polifenoles. En resumen, esta alga tiene el poder de crear moléculas de longevidad capaces de desafiar los signos del paso del tiempo y preservar la juventud de la piel.
Pero en Secret d’Excellence el alga de las nieves no está sola. En su una fórmula también encontramos Vitaminas (B3, E y C) para iluminar el rostro, proteger de los radicales libres y unificar el relieve cutáneo; ácido hialurónico combinado con glicerina para lograr un efecto hidratante y repulpante y agentes difuminadores ópticos empolvados para conseguir un efecto matificante perfecto y un relieve cutáneo más fino.
La crema es blanca, huele ligeramente a muguet y rosa y tiene una textura que también ha sido fruto de muchas horas de investigación ya que se ha creado expresamente para que el alga de las nieves conserve toda su eficacia hasta el momento en que entra en contacto con la piel. La fórmula se estructura en forma de estrella formada por microgotas de aceites más finos que los poros de la piel que están rodeados de un emulsionante específico. Cuando se aplica la crema, al contacto con el calor de la piel, los aceites se funden y la sensación es más parecida a la que se obtiene con un serum que con una crema.