Frescor a la italiana, por John Queras
Aunque es cierto que suelen ser un poquito intensos, también lo es que inventaron, y perfeccionaron hasta límites insospechados, il dolce far niente. El carácter italiano se mueve con total libertad entre las pasiones más vehementes y el noble arte de no hacer nada. Y recorre el camino entre estos dos puntos opuestos exactamente con el mismo nivel de hedonismo, es decir, absoluto. Esta dualidad se percibe en su riquísima herencia perfumística que, cuando llega el verano, se tira de cabeza al mar Mediterráneo en busca tanto de olores como de inspiración y deja para más adelante esas fragancias densas y concentradas que también llevan el inimitable sello made in Italy. Pero hoy, en pleno agosto, nos atraía más hablar de cuatro esencias frescas elaboradas por otras tantas firmas italianas que son como la brisa marina de su extenso legado olfativo.
Empezamos con Versace Man Eau Fraîche (73,50 € / 100 ml), una composición que renueva los ingredientes de la perfumería tradicional for men con notas inesperadas, como la de la carambola, una fruta exótica con forma de estrella, que se une a la frescura mediterránea del limón blanco y al toque especiado del estragón. El resultado es un cóctel aromático y amaderado con un punto descarado.
Seguimos con Light Blue Eau Intense pour Homme, de Dolce & Gabbana (82 € / 100 ml), un refrescante combinado de cítricos en el que la mandarina y el pomelo aportan un acorde muy fresco y el enebro añade la nota salada, evocando así las cristalinas y azules aguas del Mediterráneo. El maestro perfumista Alberto Morillas, del que me declaro fan incondicional, es la nariz detrás del perfume.
En Valentino Uomo Acqua (98 € / 125 ml), la intensidad de su frescura nace directamente de los aromas de un jardín italiano: mandarina, limón, tomate verde… El corazón de pachuli, la blancura del cuero nacarado y una nota de salvia proporcionan una actitud renovada a la creación original.
Y terminamos este paseo olfativo con la discreta ligereza de Armani Code Colonia (77 € / 75 ml), una esencia de espíritu relajado e informal, pero muy elegante. Cítrica (contiene bergamota, mandarina y pimienta rosa) y aromática, con una nota de salvia, es el suave acorde de azahar el que proporciona ese extra de frescor. La fragancia permanece en piel gracias a la nota amaderada y ambarina del haba tonka.
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