Luna de miel en Nueva Zelanda: destinos y experiencias románticas para una aventura inolvidable
Entre todos los destinos del mundo para un viaje de novios, vivir una luna de miel en Nueva Zelanda será algo mágico e inigualable
Organizar el viaje de novios es una de las labores previas a la boda que más ilusión hace a las parejas que van a pasar por el altar. Sin embargo, lo cierto es que esta tarea se puede complicar por diversas razones. Una de las decisiones más difíciles es ponerse de acuerdo para escoger un destino y es que, se trata de la primera escapada como marido y mujer, por lo que debe ser un lugar único que se encuentre a la altura de la ocasión. Entre todos los destinos, apostar por una luna de miel en Nueva Zelanda será un acierto asegurado. Hoy te dejamos los mejores destinos y experiencias románticas para disfrutar al máximo del viaje de novios.
Luna de miel en Nueva Zelanda: todas las ventajas
Si estás buscando un destino inigualable para tu viaje de novios, la luna de miel en Nueva Zelanda será una magnífica elección. Este país insular, ubicado en el Pacífico Suroeste, es un verdadero paraíso para los amantes de la naturaleza, la aventura y la tranquilidad. Con paisajes de lo más espectaculares y diversos, hay una gran cantidad de entornos de lo más románticos para disfrutar en pareja, desde playas de arena blanca o lagos cristales hasta montañas nevadas o bosques tropicales.
Una luna de miel en Nueva Zelanda ofrece experimentar una cultura totalmente distinta como es la cultura maorí. Se podrán visitar pueblos maoríes en Rotorua, aprender sobre sus costumbres, participar en una ceremonia de bienvenida llamada pōwhiri o disfrutar de una cena tradicional hangi. Además, este país es conocido por su amabilidad, hospitalidad y gran seguridad y es un destino comprometido con el medio ambiente y de lo más tranquilo.
Debes saber que las estaciones son opuestas a las del hemisferio norte. El verano allí tiene lugar de diciembre a febrero, por lo que si celebras una boda de invierno, podrás disfrutar de tu luna de miel en Nueva Zelanda con buenas temperaturas. Por su parte, el invierno es de junio a agosto. Si te casas en esos meses, puedes organizar una luna de miel en Nueva Zelanda invernal. No obstante, siempre puedes hacer tu viaje de novios más tarde y elegir la fecha que más se adapte a tus preferencias. Y una ventaja adicional es que se encuentra muy cerca de Australia y las Islas del Pacífico Sur, por lo que si quieres visitar más de un país, será tu oportunidad.
Imprescindibles para disfrutar en Nueva Zelanda
Wellington, la capital de Nueva Zelanda, es joven, multicultural y tiene mucho ambiente. También es una de las más ventosas del mundo. No dejéis de visitar allí el principal museo del país, el Te Papa National Museum, uno de los más curiosos del mundo. Allí encontrarás la casa terremoto, preparada para experimentar un terremoto de 6,6 en la escala Richter, el espécimen de calamar rosa conservado más grande del mundo o la historia general de nueva Zelanda, entre otras muchas curiosidades.
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Si eres fan de la trilogía de Tolkien El Señor de los Anillos, sabrás que se rodó en Nueva Zelanda y te encantará visitar tanto las tierras de Mordor como la aldea de Hobbiton y otras muchas localizaciones del rodaje. Aunque el pueblecito de casas excavadas en las verdes colinas de una montaña donde arranca la aventura de Frodo, Bilbo, Sam y compañía no es una aldea real, tras el rodaje se decidió conservarlo y permitir su visita, convirtiéndose en uno de los atractivos turísticos del país, ideal para vivir una de las experiencias únicas para parejas en Nueva Zelanda.
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Por su parte, el Parque Nacional de Tongario, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, fue el escogido para rodar las escenas de Mordor. Se trata de un parque rodeado por imponentes volcanes activos y sembrado de lagos sulfurosos de color turquesa, fuentes termales, fumarolas volcánicas y bosques de pluviselva. Sin duda un imprescindible para visitar en una luna de miel en Nueva Zelanda.
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Además de las típicas estalactitas y estalagmitas propias de las excavaciones naturales, las cuevas luminiscentes de Waitomo tienen la particularidad de ser luminiscentes. El responsable es un mosquito endémico de Nueva Zelanda, el glowworm, que habita en ellas y que emite un pequeño brillo de origen químico tanto en su fase de larva como en la de adulto. El resultado es una suerte de bóveda estrellada que se refleja en el río que discurre en el interior de las cuevas y a través del que podéis realizar una excursión en barca. Sin duda, una de las actividades románticas en Nueva Zelanda.
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El fiordo de Piopiotahi, también conocido como Milford Sound, tiene una belleza que os dejará boquiabiertos. Impresionan los espectaculares acantilados que se elevan sobre sus aguas, llegando a alcanzar hasta más de 1.000 metros de altura en algunas zonas. Las opciones para visitarlo dependen de vuestras ganas de aventura en vuestra luna de miel en Nueva Zelanda y es que, podéis recurrir a un crucero, calzaros las botas de montaña y hacer un trekking, alquilar una piragua o incluso hacer submarinismo.
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El Glaciar Franz Josef es uno de los glaciares más importantes del país, y podéis recorrerlo a pie o en helicóptero. Os permitirá vivir una de las aventuras al aire libre en Nueva Zelanda más especiales recorriendo sus montañas y bonitas cascadas.
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En los parques geotérmicos en Rotorura encontraréis la mayor presencia maorí del país. Geiseres, piscinas y aguas sulfurosas son los responsables del olor a azufre que impregna esta misteriosa zona, donde podréis, además, visitar algunos poblados tradicionales maorís, y presenciar espectáculos tradicionales.
Verdes colinas salpicadas de grandes rocas grises conforman el paisaje de Elephant Rocks, en North Otago. Se trata del escenario de un set de rodaje de las Crónicas de Narnia y sus rocas pueden medir hasta 10 metros de ancho y vistas desde la distancia bien pueden confundirse con una manada de elefantes.
La ciudad de Auckland es el motor económico del país y cuenta con una amplísima oferta de ocio y cultural. Está construida alrededor de un campo volcánico con más de 48 cráteres extinguidos, alguno de los cuales, como el Monte Eden, ofrece vistas espectaculares de la ciudad.
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Además de contemplar el pico más elevado de Nueva Zelanda, podréis disfrutar de baños termales y practicar deportes de nieve en glaciares como el de Tasman en el Parque Nacional del Mount Cook.
El Parque Nacional Abel Tasman, situado al norte de la Isla Sur, con paradisíacas playas vírgenes de arena dorada y bosques exuberantes con puentes colgantes e innumerables miradores. Podéis hacer trekkings de diferentes duraciones, pernoctar en algunas zonas del parque o practicar deportes acuáticos, además de disfrutar de la fauna local, entre la que destacan los wekas, kiwis gigantes.
Destinos combinados
Como hemos comentado, Australia puede ser la puerta desde donde se inicie la luna de miel en Nueva Zelanda. Descubrir Melbourne o Sydney, capital del país, puede ser el mejor comienzo. Dos lugares urbanitas en los que os empaparéis de su cultura para luego dar el salto a Nueva Zelanda, donde la naturaleza os cautivará.
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Por su parte, una de las combinaciones más populares es un viaje de novios Nueva Zelanda-Fiji. Situadas en el sur del Océano Pacífico, las Islas Fiji son 333 islas formadas por preciosas playas, arrecifes de coral y selvas tropicales. Si estás buscando una experiencia única que combine la belleza natural de Nueva Zelanda con la serenidad de las islas tropicales de Fiji, entonces estás en el lugar correcto.
Por último, una luna de miel en Nueva Zelanda y la Polinesia es una experiencia de viaje verdaderamente única. Un itinerario que te llevará a través de algunos de los destinos más hermosos y exóticos del Pacífico.
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Y ahora que conocéis todo sobre una luna de miel en Nueva Zelanda, ¿Os atrevéis?