¿Qué puedes hacer si llueve en tu boda?
Puede que uno de los miedos en el día de vuestra boda sea la lluvia. Casi todas las parejas quieren que haga un sol radiante y que la lluvia no arruine toda la celebración.
Pero, si os casáis pronto con el amor de vuestra vida, este tiene que ser el menor de los problemas. Aún así, os queremos recomendar las diferentes posibilidades para una boda pasada por agua.
Boda con lluvia: ¿qué se puede hacer?
Por supuesto, la lluvia no es considerada una adversidad, más bien todo lo contrario. ¿Quién no ha escuchado aquello de “Novia mojada, novia afortunada”?
- Carpas para que la fiesta no pare
La carpa sería un elemento esencial para la celebración de vuestra boda. Resguardará a todos vuestros invitados y será vuestra mejor aliada, tanto para la lluvia como para el viento. Además, este tipo de estructuras crean un ambiente muy acogedor y las hay de un montón de formas.
- Zapatos, lo más cómodos posible
Debéis tener cuidado con el calzado que escojáis. Nuestro consejo es caminar con un calzado cómodo para llegar al lugar de la celebración. Luego os podréis cambiar. Evitad los tacones o zapatos que puedan escurrirse con el agua. Intentad ser prácticos. Lo mejor son unas botas de agua que podréis compraros a juego o unas zapatillas. Procurad que sea un calzado impermeable y…¡cuidado con los charcos!
- Las flores de la boda durarán más
Las flores aguantan mal el calor y el bochorno, y enseguida tienen un aspecto mustio. Con la lluvia soportarán mejor el día, siempre que no caiga una lluvia torrencial.
- La lluvia reduce el polen y los alérgicos lo agradecerán
Si alguno de vuestros invitados, o de los novios, sufre alergia, lo único que no desea el día de la boda es que haya un cielo cálido y soleado, ya que estas son las condiciones perfectas para acelerar la alergia, enrojecer la nariz y los ojos. La lluvia reduce el polen en el aire y seguro que con ella cualquier alérgico se siente mejor.